Pienso en las mujeres que me han acompañado y pienso en un eco. Un eco fuerte y profundo. Pienso en magia. Pienso en vida. Gracias a ellas, mantengo la esperanza.

Pienso en las mujeres que me han acompañado y pienso en un eco. Un eco fuerte y profundo. Pienso en magia. Pienso en vida. Gracias a ellas, mantengo la esperanza.
Si un día no regreso, quémenlo todo. Hoy lo creo y lo siento, pero hubo un tiempo en el que no fue así. Cuando estuve en una relación abusiva sentía que no valía nada. ¿Cómo creer entonces que vale la pena quemar el mundo por alguna de nosotras? Así. Quemándolo. Quemémoslo todo. ¿Qué ganamos con esto? Ruido. Incomodidad. Fuerza.
La vulnerabilidad se asemeja a florecer. Abrirnos. Mostrarnos. Abrir el alma, mostrar las heridas. Ser flor. Ser vistos. Ser reconocidos.
En ocasiones, todos necesitamos anclar en un puerto y encontrar refugio. Hagamos de este mundo un refugio.